La especialista Anne McTiernan del Centro Fred Hutchinson de Investigación en Cáncer (Estados Unidos) llegó a estas conclusiones tras realizar una investigación donde encontró que el problema se encuentra en la hora del snack.
"Muchas personas creen que seguir una dieta para perder peso significa que siempre tendrán hambre. Nuestro estudio sugiere que comer un snack puede ayudar a perder peso si no se come muy cerca de las otras comidas", sostuvo la especialista. Sus conclusiones fueron publicadas en la revista Journal of the American Dietetic Association.
SNACKS QUE AYUDAN U OBSTACULIZAN
Para llegar a dichas conclusiones McTiernan trabajó con 123 mujeres que sufrían un sobrepeso u obesidad. Las voluntarias fueron divididas en dos grupos que realizaron dos programas diferentes para bajar de peso, uno de los cuales incluyó actividad física. Todas recibieron consejos para bajar de peso pero no se les comentó nada con respecto a los snack.
Un año después, cada voluntaria anotó con que frecuencia y en que horario solía comer los snacks, y que alimentos elegía. Además, los investigadores registraron la pérdida de peso de cada una de ellas y notaron que las mujeres que mantuvieron el hábito de comer algo a media mañana bajaron un 7% de su peso corporal mientras que las que evitaron estas comidas lograron descender un 11%.
"Creemos que este hallazgo no se relaciona necesariamente con la hora del día en que una persona come un snack, sino en el corto intervalo entre el desayuno y el almuerzo. Las personas deben determinar si hay un largo intervalo – de más de cinco horas – entre las comidas. Agregar un snack puede ayudarlos a lidiar mejor con el hambre", dijo McTiernan.
"Los mejores snacks para bajar de peso son las proteínas como el yogur descremado, queso, las nueces, frutas frescas, galletas de granos integrales y bebidas sin calorías", recomendó.
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