ESPAÑA ESPERA A LA ONU PARA UNA RESOLUCIÓN EN SIRIA

España espera que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas "sea capaz" finalmente de acordar una resolución sobre el desmantelamiento de las armas químicas en Siria, según dijo hoy el ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo.

La discusión sobre el conflicto sirio es "una ecuación que tiene muchísimas variables", aunque con "una respuesta firme" a nivel internacional por el uso de armas químicas explicó García Margallo en unas declaraciones a la prensa.

Las discusiones sobre Siria van a ser uno de los ejes del período de debates de la Asamblea General de la ONU que comienza el martes, aunque muchos líderes internacionales están en Nueva York desde hoy o mañana para convertir a la ciudad de nuevo en la capital diplomática mundial.

Estados Unidos, Francia y el Reino Unido quieren una resolución firme del Consejo de Seguridad que incluya la amenaza del uso de la fuerza si Damasco incumple su compromiso de entregar todas sus armas químicas, mientras que Rusia se opone a ir tan lejos.

El ministro resaltó que la situación en torno a Siria "evoluciona a una enorme velocidad", por lo que ahora mismo es mejor esperar a ver los próximos acontecimientos y confiar en que el Consejo de Seguridad pueda formular "una resolución", puesto que lo contrario "no contribuiría al prestigio de Naciones Unidas".

García Margallo advirtió que la guerra civil en Siria seguirá con independencia de los acuerdos que pueda haber en el Consejo de Naciones Unidas sobre las armas químicas en manos del régimen de Damasco.

Por ello, dijo que España, que ya ha celebrado dos reuniones con dirigentes de la oposición siria, está preparando una tercer encuentro, que se celebraría en Córdoba, para promover que la oposición moderada tenga "una plataforma común" de cara a una eventual reanudación de las conversaciones de Ginebra.

La guerra "militarmente no tiene solución", por lo que hace falta promover un acuerdo de paz que ponga fin a lo que definió como la mayor catástrofe humanitaria del siglo XXI.

García-Margallo recordó que "sin mandato de Naciones Unidas España no puede intervenir" en una eventual acción punitiva contra Siria, pero no aclaró si el país permitiría el uso de bases militares en suelo español en caso de un eventual ataque armado contra el régimen de Damasco.

Uno de los puntos esenciales de la participación de España en esta Asamblea General será la promoción de su candidatura a formar parte del Consejo de Seguridad de la ONU para el período 2015-16, en una elección que tendrá lugar en octubre del año próximo.

García Margallo explicó que España concentrará su labor en tres grupos de países: los caribeños, los africanos y las islas del Pacífico, además de que resaltará su trabajo y su aportación para la consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) en un acto que se celebrará el miércoles en paralelo.

"Está bastante claro lo que España puede exhibir como miembro del Consejo de Seguridad", destacó.

Los rivales de España en esa elección serán Nueva Zelanda y Turquía (tres países para dos puestos).

El ministro de Exteriores destacó especialmente a Turquía, que "es un rival muy difícil" debido a su posicionamiento como puente entre Europa y Oriente Medio y a su creciente presencia económica en África.

El ministro de Exteriores avanzó que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, mencionará en su intervención al pleno del próximo miércoles la cuestión de Gibraltar, pero descartó que vaya a presentar elementos nuevos ya que el diálogo que se refiere a cuestiones (como pesca o fiscalidad) que se sitúan más en el marco de la legislación de la Unión Europea.

García-Margallo participará también mañana en un encuentro con organizaciones judías estadounidenses, a las que explicará entre otros asuntos la evolución de la economía española, y el martes acudirá a un evento de promoción en Nueva York de productos españoles.

El jueves, participará en una reunión con los cancilleres iberoamericanos para preparar la Cumbre Iberoamericana de Panamá los días 18 y 19 de octubre.